El Panorama de Amenazas para América Latina de Kaspersky revela que la región sufrió más de 1.2 mil millones de ciberataques de phishing en el último año, en promedio 3.5 millones cada día. Esta estafa digital sigue siendo una de las más lucrativas del cibercrimen y también se pone “en oferta” durante el Black Friday.
Mientras miles de personas buscan las mejores ofertas en internet, los ciberdelincuentes acechan tras sus datos personales, información bancaria y dinero. Según datos de la compañía, 29% de los usuarios afectados en la región ha perdido entre US$100 y US$500 en fraudes al comprar en línea.
En Centroamérica y el Caribe las cifras son alarmantes. En República Dominicana, por ejemplo, se registraron 4 millones de ataques en el último año, ¡unos 11,000 cada día! Costa Rica registró 7.9 millones de ataques en el último año, en promedio 21,000 al día; Guatemala 6.4 millones que equivale a 17,000 al día; Panamá 6.3 millones ataques que representa 17,000 al día; mientras que El Salvador 2.5 millones que representa 7,000 al día.
En relación con los usuarios afectados por fraudes al comprar en línea, Costa Rica reportó un 39%; Guatemala 19% y Panamá un 12%.
Para llegar al desfalco de dinero, los estafadores despliegan tácticas de engaño que comienzan con ofertas y notificaciones falsas, trampas que prometen descuentos irreales y apelan a tu impulso de compra inmediata. Muchas llegan desde redes sociales: publicaciones, anuncios o perfiles que suplantan tiendas reconocidas o pequeños negocios con “descuentos exclusivos”. Otras adoptan la forma de mensajes, correos o llamadas que, además de ofrecer promociones, alertan sobre “supuestos problemas con tu pedido” o “fallas en el pago” para provocar una reacción instantánea.
Según un estudio de Kaspersky, 50% de los latinoamericanos ya cayó en la trampa de fraudes que explotan estos impulsos. En la región centroamericana, los guatemaltecos registran un 54%; Panamá un 53% y los costarricenses un 52%.
Cada clic impulsivo conlleva al siguiente riesgo: los sitios fraudulentos, el escaparate donde los ciberdelincuentes exhiben sus engaños más elaborados. Diseñan portales casi idénticos a los originales, cambian letras en la dirección web y copian diseños, logotipos y secciones completas para simular una experiencia real de compra. Algunos se hacen pasar por grandes marcas; otros, pequeños comercios con páginas recién creadas, fotos atractivas y reseñas inventadas. Tan convincentes son que 60% de los latinos no distingue un sitio falso y ya ha caído en uno. Aquí comienza la fase crítica del fraude: el hurto de tus datos y tu dinero.
En esta etapa, los procesos de pago lucen legítimos, pero los datos personales compartidos: nombre, correo, teléfono o información bancaria, no terminan en un sistema seguro, sino directo a los bolsillos de los estafadores. Con esa información pueden clonar tus tarjetas, hacer cargos no autorizados, suplantar la identidad de las víctimas o comercializar tus datos en el mercado negro.
En la región, uno de cada tres usuarios ya fue víctima de fraude con cuentas o tarjetas bancarias. En Centroamérica, específicamente en Guatemala se registra un 37%; Costa Rica 34%; mientras que Panamá un 21%.
De acuerdo con Carolina Mojica, Gerente de Productos para el Consumidor para las regiones Norte y Sur de América Latina en Kaspersky, “El phishing sobresale como un ataque masivo, automatizado y de bajo costo, lo que lo convierte en una herramienta altamente lucrativa para los criminales, especialmente en épocas como el Black Friday. Con un solo envío, pueden alcanzar a miles de usuarios y adaptar el engaño a distintas plataformas.
Cualquier descuido puede significar pérdidas económicas y en una disminución de la confianza en el comercio digital. La verdadera protección empieza antes de comprar, con precaución y verificación desde el primer clic”.
Con hábitos digitales seguros, cualquier persona puede reducir significativamente los riesgos y disfrutar las verdaderas ofertas con total seguridad. Por eso, este Black Friday, Kaspersky comparte una breve guía con tres sencillos pasos para no ser víctima de fraudes:
Detecta las ofertas falsas antes de dar clic. No toda ganga en internet es real. Desconfía de mensajes o anuncios que prometan promociones increíbles o que te urgir a comprar “ya mismo”. Antes de pagar, verifica: que la página tenga candado en la barra de direcciones y comience con https, el diseño, las imágenes y textos sean claros y profesionales, en redes sociales, que el vendedor sea legítimo: cuenta verificada, comentarios auténticos y fechas coherentes.
Protege tus datos personales y bancarios. Imagina tus datos como tu efectivo: no los expongas en cualquier lugar: evita ingresar datos financieros en apps o webs sospechosas, usa tarjetas digitales con códigos de seguridad dinámicos (cambian con cada compra), nunca compartas contraseñas ni datos bancarios por correo, mensaje o llamada, aunque digan ser de tu tienda, banco o paquetería, activa alertas de compra para recibir notificaciones inmediatas si alguien intenta usar tus tarjetas sin autorización.
Compra desde un equipo seguro. Hoy la mayoría de las compras se hacen desde el celular y es tu centro de compras, así que requiere seguridad extra: instala soluciones de seguridad, como Kaspersky Premium, que identifiquen enlaces de phishing, bloqueen páginas fraudulentas y protejan tus pagos en línea, mantén tus dispositivos y aplicaciones actualizados para evitar vulnerabilidades, nunca uses redes Wi-Fi públicas para comprar.





















