La oficina regional europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) urge este martes a los gobiernos europeos a implementar medidas drásticas contra el consumo de alcohol, que provoca miles de muertes anuales por cáncer y genera impacto económico devastador.
Estrategias clave como subir impuestos al alcohol o el precio mínimo, elevar la edad de compra, reducir horarios/volumen de venta, restringir publicidad o monopolios estatales demuestran eficacia para frenar el consumo, según OMS-Europa y la Agencia internacional para la investigación sobre el cáncer (IARC, por sus siglas en inglés).
En 2020, el alcohol generó cerca de 111.300 nuevos diagnósticos de cáncer -el 70 % en hombres- en la UE y 93.000 fallecimientos.
El impacto económico de los decesos prematuros por cáncer relacionado con el alcohol ascendió a 4.600 millones de euros (datos de 2018), cifra que escalaría a “decenas de miles de millones” si se considerasen gastos por hospitalización, lesiones, violencia y merma de productividad.
«La región europea de la OMS, especialmente los países de la UE, afronta un coste devastador por el alcohol: cánceres evitables, familias destruidas y miles de millones para los contribuyentes», afirmó en un comunicado Gundo Weiler, director de prevención y promoción de la salud en OMS-Europa, con sede en Copenhague.
Weiler enfatizó que, aunque el alcohol se perciba como herencia cultural, «la enfermedad, la mortalidad y la discapacidad no deberían normalizarse como parte de la identidad europea».
 
			








 
    	














