Anacaona, la Reina de las Quisqueyanas, gobernó el cacicazgo de Jaragua tras la muerte de su hermano Bohechío y estaba casada con el cacique Caonabo, cabeza del cacicazgo de Maguana.
Teatro Talassa y Nileny Dippton Productions presentan «Anaka-O-Na», un montaje teatral que honra nuestra máxima heroína ancestral, desde el 9 al 12 de octubre en la sala Ravelo del Teatro Nacional.
La historia, con la dirección de Fausto Rojas, se cuenta en medio de canciones, proyecciones e interpretación.
El montaje es con la producción general de Cristian Martínez y de Nileny Dippton, también dramaturga y actriz de la pieza, en la que ella se adentra en la piel de 14 personajes.
«Anaka-O-Na», la Flor de Oro de Quisqueya, es una investigación que expone la realidad de una cacica, a la llegada de los colonizadores a nuestra Kiskairy.
«Este evento va dirigido a las familias con la finalidad de mostrar nuestra hermosa herencia ancestral y la fortaleza de nuestra raza”, expresó Nileny durante el encuentro de prensa realizado el martes en el restaurante Cappuccino.
Esta historia, narrada y vivida en una experiencia inmersiva, con tecnología de la era digital, hará un antes y un después en lo que a nuestro personaje se refiere, insertándolo con fuerza en nuestra cultura actual.
Areitos bailados y cantados, sonidos de instrumentos musicales indígenas, trinos de aves de Kiskairy, efectos especiales y proyecciones que complementan escenas, convierten esta pieza teatral en un hito para la cultura dominicana.
«Anaka-o-na», que cuenta con la producción ejecutiva de Nolandia Estévez y como invitada especial, encarnando cinco personajes, a la niña actriz Nefer Galaxia, estará en la cartelera de la Sala Ravelo de jueves a sábado a las 8:30 de la noche, y domingo a las 6:30 de la tarde. Entrada general: RD$1,500.00.
“Gran parte de la historia de nuestros aborígenes, arauacos insulares que llamamos taínos, ha sido narrada por impresiones del primer momento de la colonia española», refiere Martínez.
El primer nombre femenino de la isla que emerge con gran fuerza en las crónicas antiguas es el de Anacaona, originalmente Anaka-o-na o Annaka-iouna, cacica de Jaragua y Maguana que formaban el territorio o reino de Bainoa, que abarcaba casi tres cuartas partes de la isla.
Esta obra teatral, basada en datos e investigaciones históricas profundas, y que por razones de teatralidad y escénicas, tiene parte dramáticamente creadas con el fin de dar una secuencia lógica a la trama, trata de la vida de la primera heroína ancestral de Quisqueya, desde su nacimiento entre las aguas de Jimenoa hasta su muerte en la Fortaleza Ozama.
Anaka-O-Na es la sucesora del reino del gran Tuob o Turey-Guá-Hobín, el resplandeciente, manera de nombrar al soberano de Bainoa, que era un reino con territorios dependientes, llamados cacicazgos. Controlaba toda la isla desde dicho reino, razón por la cual la convierte en el objetivo principal para la conquista de nuestra tierra.
«Adentrarnos al mundo de Anacaona, nos permite una vez más reconocer el poder de la mujer de Quisqueya, desde sus orígenes. La preponderancia femenina, en la isla ha predominado en todos los estamentos, elevándola a niveles que en otras naciones son inalcanzables aún”, se indicó en el documento de prensa sobre Anaka-O-Na.
Con la inteligencia artificial enlazarán las escenas por medio a la interpretación de una actriz que nos presenta un ser muy especial: Nagual-Tajei-Ápito-Goeiz o Cyborg, que para los tainos era denominado “Cosa del infinito o ser con vida”. Divinidad encarnada.
La obra se enriquece con proyecciones, canciones o areitos, trinos de pájaros, efectos de sombras que interpretan escenas, así como figuras oraculares, sombras y espíritus de luz, etc. Los cambios de etapas por medio a la luna y al sol, son muy importantes en interpretativos. El idioma arauaco predomina en todas las escenas de la obra.
Esta obra aún ficticia en parte, trata de poner hechos y opiniones en otra visión, cambiando la perspectiva a la que estamos habituados a ver.
Al final, encontraremos algunos datos históricos y bibliografías de autores de la investigación indigenista y crónicas de autores clásicos, justificando con ellos esta interpretación con nuestra puesta en escena, la cual nos narra y presenta la vida de la Flor de Oro, nuestra principal heroína ancestral, Anacaona, también llamada “La que está en el centro”, Anaka-O-Na, o como le llamaría el experto en taínos, José Juan Arrom, Annaka-Iouna, «centro o corazón de lo celestialmente valioso».
 
			








 
    	














