El Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático (CNLCC), y el Instituto de Abogados para la Protección Ambiental (Insaproma), emplazaron a la gerencia de la Termoeléctrica Punta Catalina a entregar copia del registro digital automatizado de las emisiones de las plantas de carbón de esa central.
Mencionaron la nota de prensa que publicó esta empresa el pasado viernes para desmentir la denuncia de los polémicos desfogues nocturnos de las plantas de carbón de Punta Catalina asegurando que se registran segundo a segundo los niveles de emisiones aéreas de estas unidades en un sistema automático y digitalizado, cuidando que se cumplan los más altos estándares de calidad.
Tomándole la palabra a la gerencia de Punta Catalina sobre la existencia de este registro automatizado y digital de las emisiones aéreas, las organizaciones solicitan la entrega de copia del mismo, especialmente las del pasado jueves 2 hasta el lunes 6 de octubre, para comprobar si hubo o no el controvertido desfogue denunciado de las plantas.
Se comprometieron que tan pronto tengan copia de este registro de emisiones, lo someterán al escrutinio de expertos nacionales e internacionales independientes que podrán verificar o descartar el evento denunciado y también certificar los niveles reales de contaminación aérea de Punta Catalina.
Afirmaron que para este análisis cuentan con la colaboración de instituciones tan prestigiosas como la Universidad de Duke, de Durham, Carolina del Norte, EUA, y el Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio (CREA), de Finlandia.
Señalaron cuando el 15 de noviembre de 2021, a raíz de iniciar conjuntamente con el Ministerio de Medio Ambiente RD la elaboración del estudio sobre la grave contaminación de Punta Catalina, requirieron al entonces ministro de esa cartera, Orlando Jorge Mera, mediante carta, este registro contenido en los dispositivos DHAS y SMS de las plantas de carbón.
Explicaron que cuando hicieron esta solicitud, el Ministerio de Medio Ambiente abandonó los trabajos de este estudio dispuesto por el presidente de la República, Luis Abinader, y finalmente fue concluido sin la participación de este ministerio, además de la oposición de la gerencia de Punta Catalina.
Plantearon que además de establecer si ocurrieron o no los polémicos desfogues nocturnos, es necesario indicar de manera transparente los niveles ordinarios de contaminación atmosférica de Punta Catalina.
Informaron que los valores que declara Punta Catalina de emisiones de dióxido de nitrógeno (NO2) y de dióxido de sulfuro (SO2) son de 400 mg/Nm3, y de Micropartículas 30 mg/Nm3, cuando las normas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que deben ser respectivamente, 150, 130 y 10.
Es decir que la contaminación aérea declarada por Punta Catalina es varias veces superior a las normas de la OMS.
“Por esa razón, el relator especial de las Naciones Unidas, Marcos Orellana recomendó el pasado 21 de septiembre, en su informe ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que la República Dominicana abandone el carbón en Punta Catalina sustituyéndolo con gas natural o energías renovables, y revise las normas vigentes de calidad del aire para adoptar los estándares de la Organización Mundial de la Salud”, recordaron.
Aclararon que el desfogue produce una descarga de residuos, de micropartículas y de gases venenosos a la atmósfera infinitamente superior a lo que habitualmente emiten las plantas de carbón de Punta Catalina.
“Es decir que al impacto negativo de las emisiones habituales de Punta Catalina se suma esta extraordinaria descarga que se efectúa mediante el procedimiento de desfogue de las plantas de carbón. Por eso está prohibido que se realicen este procedimiento, catalogado como un grave crimen ambiental”, subrayaron.
Las organizaciones acusaron a Punta Catalina de realizar desfogues ilegales y nocturnos, con la finalidad de no sacar las plantas de operación para darle el mantenimiento apropiado, y ocultar esta operación criminal aprovechando la oscuridad de la noche.
 
			








 
    	













