Desde junio de 2025 hasta la fecha, la Dirección General de Migración ha confirmado la muerte de tres personas, por diferentes causas, en el Centro de Procesamiento Migratorio de Haina, en San Cristóbal.
El último deceso fue reportado este viernes. Las autoridades solo informaron que se trata de “un bebé recién nacido”, quien se encontraba junto a su madre Melisa Jean Batista, una joven ciudadana haitiana de 20 años, que había sido detenida en Baní por su condición migratoria irregular y trasladada al referido centro acompañada de su hijo.
El pequeño, de acuerdo a la nota, mientras era amamantado en horas de la madrugada presentó un episodio de inquietud, seguido de hipo y señales de dificultad respiratoria.
“El personal médico acudió a su auxilio, lo trasladó al dispensario del centro y aplicó las maniobras correspondientes para intentar estabilizarlo. Al mismo tiempo, se activó el protocolo de emergencia y se solicitó apoyo al Sistema Nacional de Emergencias 9-1-1”, quienes continuaron “las maniobras avanzadas de reanimación y dispusieron su traslado al hospital de San Cristóbal. Lamentablemente, pese a los esfuerzos realizados en todo momento por el personal médico y de emergencia, no fue posible restablecer sus signos vitales”.
Otros decesos
En septiembre de este año también se informó la muerte de Gedilia Lonzandieu, de 36 años de nacionalidad haitiana, quien manifestó sentirse mal al momento de su llegada a ese centro tras ser detenida en La Vega.
La mujer falleció al sufrir un paro cardíaco, tras presentar una crisis de ansiedad, palidez, sudoración y signos de deshidratación.
La primera muerte reportada fue el 24 de junio. Se trata de la ciudadana estadounidense identificada como Ellen France Hulett o Ezri Hajune. La misma fue detenida en Sabana de la Mar por una patrulla de Politur y entregada a la DGM por no portar documentos de identidad.
De acuerdo a Migración, la mujer se identificó como una persona del sexo masculino y hermafrodita, una afirmación que resultó no ser cierta.
De acuerdo a Migración, esta ciudadana no presentaba indicios de violencia en su cuerpo. Las autoridades informaron que la causa de su muerte sería determinada a través una autopsia realizada por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) y el resultado nunca se conoció.
Un reporte posterior de Estados Unidos indicaba que falleció por falla respiratoria, edema pulmonar e insuficiencia cardíaca aguda.




















